El pasado lunes fuí a una empresa en Alboraya para pedir un presupuesto que necesitaba y cuando llegué pregunte por el dependiente a una persona que estaba acomodando genero subido en una escalera, me dijo que tenía que hablar con él y que lo esperara un momento.
Fuimos a la oficina y me pregunto que necesitaba, le comente lo que quería, me sugirió el tipo de artículo necesario y me saco unas muestras apropiadas de lo que buscaba.
Ví su muestrario y le dije que quería estos 3 tipos de artículos después de seleccionarlos. El comercial me dió los detalles técnicos de los artículos. Al final me preparo un presupuesto muy completo de las formas distintas de packs en que venían sus productos, también me resolvió como debía comprárselos y que me lo podían enviar a mi domicilio por una transportadora y además cuantos días aproximadamente me llegarían. Me contesto muy satisfactoriamente todos mis requerimientos de lo que andaba buscando.
La sensación cuando salí de la empresa era de estar satisfecho con la respuesta obtenida y que la asesoría recibida fue la apropiada. El comercial se comportó como debía ser: amable, oportuno, tranquilo, dándome la solución de lo que buscaba. En conclusión fuí muy bien atendido.
Por supuesto si el proyecto sigue adelante por lo menos lo voy a tener en cuenta como un proveedor clave para el proyecto que estoy emprendiendo.